Los conflictos laborales son un hecho más habitual de lo que se puede creer, es por ello que hay saber llevar un adecuado Manejo de conflictos, si te interesa saber mucho más acerca de este tema, te invitamos a continuar leyendo este post.
Manejo de conflictos
Saber manejar los conflictos que pueden surgir dentro de una empresa u organización es algo muy ventajoso no solo para los directivos, sino que también para los trabajadores y para que exista un ambiente laboral agradable. La pronta resolución de los problemas implica sin duda alguna una mejora en las relaciones interpersonales entre los empleados, cosa que influye mucho en el rendimiento de los mismos y es ventajoso para la organización en general.
Los conflictos laborales, se pueden definir como ciertas discusiones que surgen dentro del área laboral de una empresa, estos conflictos pueden suceder entre dos o más empleados. Cómo lo mencionamos ya, las discusiones laborales se dan de forma habitual, más de lo que imaginamos, y es algo totalmente natural.
Al menos en algún momento de nuestras vidas hemos tenido alguna discordia con algún compañero o compañera de trabajo. El origen de los conflictos se da cuando una persona siente que otra está interfiriendo con sus objetivos o intereses y decide no callar, por lo que procede a manifestar su incomodidad y desacuerdo con ciertas cosas. También se puede generar conflictos cuando dos o más personas tienen ideales distintos.
El conflicto es algo que se puede dar, no solo en el entorno laboral, al contrario, este se genera en cualquier otro entorno, en el hogar, en la escuela, en la universidad, en el bus, en pocas palabras, puedes tener un desacuerdo con alguna otra persona en cualquier lugar imaginable.
En conclusión, con esto que te decimos, queremos hacerte saber que los conflictos siempre van a formar parte de nuestras vidas, tal vez no de forma habitual, pero, siempre vamos a enfrentarnos a uno en algún momento. Si bien no se puede controlar que una circunstancia nos cause molestia o incomodidad, si que se puede intentar manejar el tiempo que esta nos dure, y una forma de evitar que algo nos siga molestando.
Con esto nos desviamos hacia las formas de enfrentar un conflicto, pues, existen diversas formas de hacerlo, por ejemplo, se puede simplemente ignorar la situación, sin embargo, esto no siempre puede resultar, porque estarías evitando el problema más no resolviendolo.
Cuando hay conflictos es recomendable, para resolverlos, dejar de lado la figura autoritaria, esa que no nos deja aceptar otras opiniones y que nos hace pensar que solo nosotros tenemos la razón, esto solo agravaría la situación porque genera más enojo en la o las otras personas con las que se tiene el conflicto, ya que con esta posición no estarías dejando que ellos expongan lo que piensan acerca de un tema.
Causas de los conflictos
Los conflictos dentro de una empresa se originan por diversos motivos, y a continuación te los mencionaremos:
- Por una mala comunicación entre trabajadores, que puede derivar en malentendidos.
- Diferencia de valores.
- Diferencia de intereses.
- Falta de recursos en la empresa.
- Choque de personalidades entre empleados.
- Ineficiencia por parte de uno o más individuos dentro de un área de trabajo.
- Falta de tares.
- Objetivos indefinidos.
- Dificultad para trabajar bajo presión.
- Mal clima organizacional.
Aquí te dejamos un vídeo acerca de los conflictos en las organizaciones:
Sin importar las causas de los conflictos dentro de un área organizacional, es importante saber como realizar un adecuado manejo de conflictos. Y no te preocupes que más adelante te mostraremos cuales son los factores que esenciales para el buen manejo de conflictos.
¿Se puede sacar ventajas de los conflictos?
Pues sí, porque como quien dice, de todo lo malo se puede sacar algo bueno, en el caso de los conflictos, estos nos ayudan a lograr ciertas cosas, como, por ejemplo: nos ayuda a mejorar la capacidad de análisis de problemas, nos ayuda a analizar y tomar las mejores decisiones, a elegir los objetivos, a establecer una forma de trabajo y a descubrir la personalidad y carácter de los distintos trabajadores.
También nos ayuda a crecer como organización, a tener más experiencias en cuanto a conflictos y a su resolución, ayuda a la detección de puntos débiles de las distintas áreas de la empresa, puede mejorar la comunicación y las relaciones entre compañeros de trabajos, se puede poner en marcha la creatividad, colabora en la definición de las problemáticas laborales y a ser conscientes de estos.
En los grupos de personas que hay dentro de una organización, existe una gran mezcla de valores, costumbres y hábitos, esto forma parte de lo que conocemos como Cultura organizacional. Si quieres saber más acerca del tema, te invitamos a leer el artículo.
Factores esenciales para un buen manejo de conflictos
Cómo lo prometimos unos párrafos atrás, te vamos a dar algunos factores claves para que sepas como llevar y manejar de la mejor manera los conflictos que puedan presentarse en la organización. Presta mucha atención.
- Mantener la calma
El principal objetivo cuando se da un conflicto laboral es encontrarle solución, es por ello que es muy necesario evitar hacer el problema uno mucho más grave, por reacciones bruscas. Es por ello que debes mantener la calma en todo momento, para de esa manera llegar a un trato que beneficie a ambas partes involucradas dentro de conflicto, sin señalar a un culpable y simplemente concentrarse en la búsqueda de la mejor solución para el problema.
- Contar con un mediador
Es recomendable tener a un mediador, que no este de parte de ninguna de las partes implicadas en el conflicto, esta persona debe ser neutral, que, en vez de agravar el conflicto, intente llegar a una buena resolución, que ayude a las personas en conflicto a dialogar pacíficamente para resolver las diferencias. El mediador no debe estar implicado en el problema, este simplemente debe buscar la creación de un clima diplomático y justo para las dos partes enfrentadas. Eso sí, esta persona no debe imponer una solución, solo se encargará de valorar el conflicto y dar recomendaciones para solventar las diferencias.
- Conversar con los implicados
No hay que dejar solas a las personas que tienen el conflicto y hay que buscar la manera de que entre ellos se lleve a cabo una especie de debate, donde cada uno tenga la oportunidad de exponer su punto de vista del conflicto. Este debate debe darse luego de establecer ciertos términos como el orden, la tolerancia y el respeto.
Sin embargo, para poder realizar esto, es necesario que ambas partes estén de acuerdo en encontrar una solución, es decir, que pongan de su parte para llegar a un acuerdo.
- Investigar el conflicto
Aquella persona que está encargada de manejar y solucionar el conflicto, deberá tomarse el tiempo necesario para estudiar el problema, cuál fue el origen, los implicados, qué consecuencias tendrá dicho conflicto en la organización. Es importante recolectar toda esa información. Puede suceder que, dentro de la organización haya más de un conflicto, sin embargo, una vez se haya hecho esta recolección, se podrá determinar, cuál de los conflictos es más necesario solventar. Se pueden priorizar.
- Realizar una negociación
Una vez que el mediador haya establecido los acuerdos y desacuerdos de las dos partes implicadas dentro del conflicto, el porqué de conflicto y los términos y condiciones del mismo, debe tener una conclusión y dar sus observaciones referentes al dilema, posteriormente preguntar a cada uno de los implicados si están de acuerdo con las recomendaciones y conclusiones.
De esta forma se puede hacer una negociación, llegar a un acuerdo beneficioso para las partes y por supuesto para la organización, de forma respetuosa y pacífica. Acuerdo que obligatoriamente las partes deben cumplir.
- Buscar soluciones
Una vez hecho lo anteriormente planteado, haber debatido el dilema, determinado sus motivos, se debe saltar al paso de buscar soluciones, y aplicar la que mejor se adecuen a la situación. Ante cualquier solución brindada debe tomar en cuenta el incluir acciones a cumplir para poder medir a los implicados, estos por dispuestos deben estás dispuestos a realizarlas. Una vez recalcamos que las partes involucradas en el problema deben querer encontrar una solución, estar dispuestos a eliminar la discordia de alguna manera.
- Hacer un seguimiento del conflicto una vez solucionado
Este paso también es importante. Una vez se ha llegado a una solución, es importante medir los resultados de la misma, si la solución que se comenzó a aplicar ha dado buenos resultados. Es importante que sepas que no siempre una solución va a tener éxito, sin embargo, basta con cambiar la estrategia para solucionar los conflictos.